
El objetivo del ejercicio es intentar marcar gol en una de las otras dos porterías defendidas por otros dos jugadores. Aprender a defender portería, atacar, aprovechar situaciones del juego. Mantenerse activo y fomentar la creatividad, intuición y cooperación.
Para preparar el ejercicio disponemos 3 porterías, formando un triangulo tal como aparece en el grafico.
La distancia que hay entre las porterías dependerá del grado de exigencia y calidad de los jugadores. Para empezar, una separación de 10m puede ser más que aceptable.
Juegan tres equipos formados por dos jugadores. Cada equipo defiende una portería. Ellos tienen que intentar recuperar el balón. También deben marcar gol en una de las dos porterías que pertenecen a los otros dos equipos.
Con esta disposición de la tarea, los propios jugadores generarán situaciones de 2×1, 1×2, 2×2, y 3×2. Tendrán que estar bien atentos al desarrollo del juego. Cualquier pérdida les puede suponer recibir un gol.
Podemos ir creando rotación de jugadores. El propósito es que todos los jugadores del equipo que están entrenando no queden parados.
Hay que fomentar la creatividad. En el 1×1, tienen que analizar cada situación en el juego por sí solos. Deben actuar dependiendo de las variables que se van produciendo continuamente.
Un ejemplo, puede ser, un equipo que recupera el balón. Hace un 2×1. En el 2×1, el regate sale largo. Un jugador del tercer equipo aprovecha la situación. Se hace con la pelota y marca él el gol.
Esto ha promovido la inteligencia. También ha facilitado el aprovechamiento y predicción de lo que puede suceder en esa determinada acción. Esto permite anticiparse para el aprovechamiento.